Escritos Espurios 38.0

Para repartir protagonismos, la entrada de hoy seguirá con las efervescencias mentales de Andrés, más  perdido que nunca en una pirámide inversa de datos y especulaciones:

Helena Blavatsky y Olcott llegaron a Bombay el 17 de febrero de 1879. La principal razón de su viaje eran las relaciones entre la Sociedad Teosófica y el Arya Samaj -sociedad fundada por el swami Dayanand Saravasti, llamado el Lutero de la India por ser un reformador del brahmanismo-. Según la policía británica, el Arya Samaj era una organización independentista escondida detrás de la pantalla protectora de sus actividades altruistas.

A los pocos días de su estancia en Bombay, recibieron una invitación del director del Pioneer -influyente periódico anglohindú- firmada por A. P. Sinett, quien ofreció su colaboración para debatir ideas y proyectos de la Sociedad Teosófica.

Años después, Sinett -afiliado a la causa de la S. T.- publicó la obra Buddhismo esotérico, calificada por Madame Blavatsky como una excelente obra con un título muy desdichado.

La razón de este comentario radicaba en la mala interpretación que se hizo al relacionar a la S. T. con el término buddhismo -filosofía religiosa de Buddha o Gautama-, en vez de aplicar el término budhismo -con una sola d- que enlaza con bodha, bodhi, inteligencia y sabiduria.

Curiosamente, tanto HPB como Olcott, en su viaje y estancia en la India iban protegidos por pasaportes diplomáticos norteamericanos, expedidos por Rutheford Hayes, presidente de los Estados Unidos. Un trasfondo político se apuntaba a lo lejos.