Escritos Espurios 22.6

Allan ha tardado más de lo habitual en escribir sus resoluciones sobre la Diada y las posibles consecuencias de la misma. Lo atribuyo a que, ante la presencia de Andrés, la comunicación furibunda, vía correo electrónico, no tenía sentido en el corto plazo. Cierto es que Allan escribe muchas cosas de manera constante en su diario personal pero, esta vez, también ha tardado en escribir sobre el tema mencionado. Estos son unos párrafos enviados a Andrés:

En su momento deduje que en la manifestación por la independencia de Catalunya "habría"un millón y medio de personas. No es que adivinase la gente que acudiría, sino que adiviné los titulares de prensa del día después, cosa muy diferente. Fue una previsión lógica atendiendo a como se expresan todos y cada uno de los organizadores de este tipo de eventos. Si en la manifestación de julio del año 2010, los organizadores hablaron de un millón, ahora, estando en juego mucho más, no podía bajarse de esta cifra, ni siquiera quedar cerca de la misma. Por tanto, mucho antes de que los manifestantes se desplazaran al lugar de reunión, este millón y medio era el cálculo más razonable que se podía imaginar. 

Es evidente que hubo mucha gente, más gente que nunca en cualquier manifestación en una ciudad española. Pero creo que no se llegó al millón de personas. No obstante, reconozco que la convocatoria fue un éxito rotundo. Fue ejemplar en su civismo y, asimismo creo, que muchísima gente no pudo estar presente, ya sea  por problemas logísticos, por enfermedad, por edad o por lejanía.