Escritos Espurios 48.2

Escuchar a las dos charlatanas catalanas -la Forcadell y la Casals- lanzando soflamas -algo parecido a lo que hacen los payasos en el circo con los niños- por la independencia de Catalunya y ver a miles de catalanes dando vítores a tanta insensatez, resulta lamentable. Hemos llegado a un grado impúdico de gran magnitud.

El dinero público que se ha repartido de manera generosa, a todos aquellos que se dejan comprar, habría servido para salvar muchas vidas en la Catalunya actual. Conozco un caso aterrador, de una persona agonizando, con metástasis, durante un par de días, en una improvisada sala de urgencias, separados los enfermos por unas cortinas.

Hemos llegado a un punto de no retorno que merece ser llamado por su nombre. Mientras la miseria se ha incrustado en miles de hogares catalanes, los que tienen el dinero de la caja lo malgastan de un modo criminal. Espero y deseo que paguen por tanta inducción a la muerte moral y física de muchos ciudadanos.