Escritos Espurios 35.6

De vuelta a El Cairo se reencontró con Metamón y, juntos, montaron un Club de los Milagros. En un viaje en barco, Helena Blavatsky, con más vidas que un gato, es uno de los pocos supervivientes del naufragio del Eumonia, frente a la costa de Spezzia, tras la explosión de un cargamento de armas.

El 7 de julio de 1873, desde Francia -donde ejerció de medium de Allan Kardec- parte hacia Nueva York. En setiembre de 1874 acude de visita a la granja de los Eddy. La crónica documental de sus peripecias será de suma precisión a partir de este momento. Del encuentro con Olcott en Chittenden nació una entente de futuro: intereses comunes, afinidades compartidas y dar a conocer una filosofía y una religión.

Helena Blavatsky puso la ciencia infusa y el ímpetu. Olcott hizo las funciones de burócrata, de organizador, una especie de secretario plenipotenciario.