Revelaciones 4.5

El restaurante La Camarga, en Barcelona, está en el disparadero. Las escuchas mediante micrófonos han sido habituales en sus mesas y cenáculos, durante años. Si saco este tema es porque durante los meses que van de junio de 2003 hasta noviembre de 2005, Allan frecuentó este restaurante. Ahí saboreó bastantes arroces caldosos. Ya es sabido que sale poco de casa pero, cuando lo hace, acude a restaurantes de bastante nivel. Nada que objetar, al menos se paga sus facturas con lo que gana especulando por los mercados de valores y derivados, no como los políticos que siempre echan mano a los fondos del partido, previa usurpación mediante malas artes.

En una ocasión Allan estuvo mesa por mesa con Artur Mas y una camarilla de familiares y amigos. Fue en el Roig Robí, un referente de la cocina barcelonesa. Allan hizo algún comentario insidioso, en voz alta pero, poco después optó por comer y callar.

Algunos políticos están haciendo declaraciones en las que realzan su honestidad. En mi opinión, la rectitud de los políticos, reside precisamente en el recto.