La narración de JAQUE A LA RAZON es elíptica. Está compuesta de relatos independientes por sí mismos. Son relatos provenientes de dimensiones próximas y alejadas, relatos perdidos en mil y una memorias, aunque predestinados a encontrarse en un punto exacto, casi banal. Y, es entonces, desde esta confluencia, cuando todo adquiere sentido.
Parece ser que todo comenzó cuando ciertas frases se mezclaron con las instrucciones de un programa de computación. O puede que todo se deba a un sinfín de casualidades imprevisibles.
Quién sabe...
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Parece ser que todo comenzó cuando ciertas frases se mezclaron con las instrucciones de un programa de computación. O puede que todo se deba a un sinfín de casualidades imprevisibles.
Quién sabe...
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