Escritos Apócrifos 7.9

Los comentarios de Allan respecto de los políticos, sin estar faltos de argumentación, pecan de un exceso de generalización. Además, las premisas que exhibe para enfrentarse al estado político-social actual solo llevan a la revuelta sin alternativas. El fin último propende a un anarquismo humanista que nunca ha funcionado, salvo en determinadas épocas y en zonas geográficas muy delimitadas. Su proyecto final es de imposible resolución.

En cuanto a Andrés, divaga menos que Allan, aunque se circunscribe demasiado a Catalunya, sus tradiciones, cultura e historia. Su aspiración máxima es la independencia de Catalunya, siendo poco relevante el grupo político que la consiga. Debo decir que su aspiración es más factible que la de Allan, aunque es poco probable. España necesita demasiado a los catalanes como para que les dejen marchar sin más. Por tanto es una opción que pasaría por un largo y doloroso derramamiento de sangre.

Mis planteamientos para resolver el grave problema de las democracias ya ha sido expuesto en anteriores escritos. En sintesis: un poder fuerte y resolutivo, sin piedad con aquellos que atenten contra el orden establecido. Un poder que debe ser justo en sus decisiones, con capacidad para aplicar leyes de manera rápida y flexible, donde cada billete gastado lo sea con sensatez.